El loco destierro del Campeador

Es un delirante relato que pone en duda la, hasta ahora, conocida historia del Cid.
¿Comentaba Rodrigo su destierro en el Facebook? ¿Eran las hijas del Cid las Paris Hilton de la época?¿Escuchaban las huestes cidianas Carrusel Medieval en la radio? Puede que nadie se hiciera estas preguntas y puede que fuera por algo, pero en este libro encontrarás toda la verdad sobre el destierro del Cid Campeador.

Ficha.
Año de Publicación: 2011
ISBN: 978-1-4466-2716-7
Número de Páginas: 290.
Formato: Tapa Blanda – Edición de Bolsillo
Editador por: activAEscritura Publicaciones Auto Editadas.

 

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SINOPSIS

Imagínate que un día viene el jefe de la empresa en la que llevas años trabajando y por la que te has dejado la piel y te despide por cualquier razón que no viene a cuento.
Pero te despide con mayúsculas, ¡eh! Te vas por la puerta de atrás y decides emprender tu propia aventura trabajando para otros al principio y montando tu propia empresa después. El caso es que te forras y después, cuando te mueres (porque esto suele pasar más pronto o más tarde) aquella empresa de la que te echaron te convierte en su icono, su referencia, su hijo predilecto.
Pues más o menos esto es lo que le pasó al Cid. Le echaron del reino de Castilla y como pilló huelga de pilotos tuvo que salir a caballo de allí. Y claro, en un aeropuerto se viven cosas, pero en un destierro a caballo ni te cuento. El caso es que al Cid se le fue juntando un montón de gente y aquello derivó en un destierro desternillante. Evidentemente a la pobre Jimena no le hizo ninguna gracia, claro. Ella allí encerrada, en una torre de San Pedro de Cardeña, que hasta para comprar el pan tenías que hacer cientos de kilómetros… es normal que estuviera un poco resentida. Además que el Cid ni se molestaba en llamarla ni nada.

Encima no había más que gente que quería hacer daño al Cid, que si el rey de Castilla, que si el califa de Al-Aldalus, que si el hombre del saco. Claro, el hombre se pasaba todo el día con la espada en alto y no tenía ni tiempo de afeitarse, dos cuestiones estas que quedan reflejadas en la estatua cidiana que preside la plaza de Mío Cid en Burgos.

Y la familia no hacía más que darle disgutos, porque la hijas eran un poco… bueno eran como todas las jóvenes, unas cabezas locas que lo único que querían era salir de fiesta y conocer chicos y al final acabaron conociendo a los infantes de Carrión, que unos pican y otros no, digo que eran un poco cabroncetes.

Total, que mezcla tu todos estos ingredientes y ya te puedes imaginar que loco destierro tuvo que vivir el pobre Rodrigo Díaz de Vivar que era un hombre tranquilo, de los de café, periódico y partido de fútbol los domingos en el plus.

Pues todo eso y un poco más quedó perfectamente reflejado en El loco destierro del Campeador, el único libro que se ha atrevido a contar esta verdad.

Cómo surge la idea

El loco destierro del Campeador repasa el destierro de Rodrigo Díaz de Vivar siguiendo los hitos marcados por el llamado Camino del Cid, promovido por el Consorcio del Camino del Cid.

El libro surge tras la realización del Camino del Cid por parte del autor. El camino, en compañía de buenos amigos, se convierte en una experiencia divertida en la que surgen bromas, chistes y situaciones de todo tipo. Motivado por ello, Oscar Revilla Diez comienza a escribir un relato, breve en principio, plasmando una delirante visión de cómo pude ser aquel destierro y las situaciones de los personajes en los lugares que él mismo había visitado.

Aquel relato corto fue creciendo hasta convertirse en el texto final que dio como resultado El loco destierro del Campeador.

El libro, de fácil y rápida lectura, sigue la propia estructura del camino, lo que obliga a tomarse determinadas licencias para imaginar un destierro cidiano calcaldo al que propone, por rutas, el Consorcio del Camino del Cid.

En cualquier caso, el doble objetivo del libro queda claro desde la primera página. Por un lado divertir al lector con un estilo que se asemeja al formato de los monólogos de humor y por otro acercar el destierro cidiano y su contexto geofráfico a cuantos se sumergan en la historia.

Las etapas

El Camino del Cid atraviesa 8 provincias, las mismas que atraviesan los protagonistas siguiendo a su líder, el Cid Campeador. Este, según cuenta el libro, escoge seguir esta ruta para no contradecir al Consorcio del Camino, no vaya a ser que se enfaden.

El Cid sale de Burgos y se marcha a Valencia huyendo de Castilla tras ser expulsado por el rey. Esto demuestra que el Cid, tonto no era. Porque podía haber ido a la zona de Galicia pero como ahí siempre está lloviendo… Luego descubrió que ir a Galicia no era, precisamente, salir del reino así que miró si le iba bien ir a la zona de Catalunya, pero resulta que ¿dónde iba el pobre Rodrigo sin saber catalán? Así ni gobernaría ni nada. Otra opción era irse a Andalucía, que en aquel entonces se la conocía como Al-Andalus. Lo de que fuera un territorio gobernado por los moros no le importaba, pero un tipo de Burgos no estaba acostumbrado a esos calores…
Total, que se fue Valencia pero, a diferencia de como vamos hoy dando un rodeo del copón por Madrid, este tomó la línea recta y cruzó Soria, Guadalajara, Zaragoza, Teruel, Castellón, Valencia y Alicante. Luego se dio cuenta que se había pasado, porque te pones a cabalgar a lomos de Babieca y ni te enteras, y se volvió a Valencia.

Los personajes

Rodrigo Díaz de Vivar, el Cid Campeador

(¡oh! Qué sorpresa, nadie imaginaba que él fuera uno de los protagonistas). Rodrigo era un hombre humilde que aprobó unas oposiciones en el seno del Reino de Castilla y entró a currar en el ejército más como cobrador de hacienda que otra cosa. Pero oye, a diferencia de lo que ocurre ahora, al Cid le acusaron de quedarse con el dinero que recaudaba y le echaron. Ayudó que le obligase al rey a jurar que no había matado a su hermano.

Rodrigo era un tipo gracioso y un poco ingenuo, por eso se rodeó de un montón de gente que sabía más que él pero que no lo sabían. Buen esposo, dedició apartar a su mujer en compañía de las niñas en un monasterio burgalés para que no sufriera en el destierro. Otros dicen que le molestaba que las niñas estuvieran preguntando todo el tiempo “si habíamos llegado ya”.

Como muchos políticos de nuestra época, el Cid llegó a ser señor de Valencia casi de rebote pero hasta aquel momento se fue forjando una leyenda porque sitio al que iba sitio que conquistaba. ¿Cómo lo hacía? Para eso hay que zambullirse en El loco destierro del Campeador.

Doña Jimena

La gran olvidada del destierro. Y es que Jimena era una mujer de armas tomar ¡eh! Muy adelantada a su época. La historia la recuerda por aquella pequeña anécdota de casarse con el hombre que asesinó a su padre. Psicólogos de la época afirmaron que Jimena sería víctima del síndrome de “esto es el colmo”.

Algo celosa, al ver que su marido era portada, día sí día también, de revistas del corazón y otras publicaciones, Jimena pasaba las noches en vela colgada del móvil esperando alguna llamada de su marido.

Más adelante, cuando su marido conquista Valencia ella se traslada a la capital del Turia, que en aquel entonces discurría por encima de la tierra. Jimena se viene arriba siendo señora de Valencia y acaba siendo la gobernadora tras la muerte de su madrido. Convertida en la Kirchner medieval Jimena pasa los días haciendo paella y diseñando lujosos trajes de fallera. De hecho uno de sus máximos logros fue nacionalizar YPF, Yacimiento de Paellas y Falleras.

Álvar Fáñez

Era la mano derecha del Cid. El mejor amigo del cid y su seguidor más fiel ha sido bautizado por la historia como burgalés de pro. Ojo, un tipo que siguió fielmente a alguien que fue desterrado por injurias al rey, acusado de robo y que mató al padre de su mujer fue considerado como burgalés de pro. ¿A que esto parece explicar muchas cosas de la vida política actual?

Las hijas del Cid

Se movían tanto que parecían cuatro. De hecho no se sabe si se llamaban María y Cristina o Elvira y Sol, entre otras cosas, por lo mucho que se movían.

Allá por el medievo no había sarao en el que no estuvieran invitadas “las campeadoras”, como se las conocía popularmente. Tuvieron la mala fortuna de conocer a los infantes de Carrión y arrejuntarse con ellos. Al Cid le gustó la idea, era mejor ver a sus hijas con unos infantes que con cualquier DJ de la época (porque, admitámoslo, la música disco del medievo tenía muy mala fama).

Alfonso VI Rey de Castilla

Poco se sabía de los reyes de puertas de su castillo para adentro, pero se sabía, a ciencia cierta, que no le gustaba nada que le hicieran jurar, que le insinuásen que mató a su hermano y tampoco le gustaba esperar. Que es normal, porque en el medievo la esperanza de vida era menor y no estaban para perder el tiempo.

Alfonso era un hombre envidioso. Fue rey de Galicia, de Leon y de Castilla… vamos lo que es un hombre de patria. Alfonso se crió en una familia numerosa, eran cinco hermano, pero él lo quería todo. Sus padres, conscientes de que cada vez conquistaban más territorios decidieron tener muchos hijos, para poder repartir los territorios, pero oye, que el tal Alfonso decía “to’ pa’ mi”.

Recursos

En este apartado dispones de algunos recursos relacionados con EL LOCO DESTIERRO DEL CAMPEADOR.

Recursos para medios de comunicación.

 

 

Aparición en prensa

EL CONSORCIO DEL CAMINO DEL CID

La máxima autoridad en materia cidiana, el Consorcio del Camino del Cid se hizo eco de la publicación EL LOCO DESTIERRO DEL CAMPEADOR, dedicándole espacios en su página web, facebook y su boletin mensual. Además, han incluido la publicación en el directorio de libros dedicados a Rodrigo Díaz de Vivar.


CANAL 54 LA TELEVISIÓN LOCAL DE BURGOS

Canal 54, la televisión local de Burgos, ha sido el primer medio en hacerse eco de la publicación de EL LOCO DESTIERRO DEL CAMPEADOR.

Su autor, Oscar Revilla, asistió a una entrevista en el programa Noche entre Amigos, presentado por Alejandro Sierra. Además, Canal 54 emite de forma habitual un spot sobre el libro EL LOCO DESTIERRO DEL CAMPEADOR.


EUROPA PRESS

La agencia de noticias Europa Press dedicó un espacio importante a nivel local y regional al libro EL LOCO DESTIERRO DEL CAMPEADOR. A través de esta agencia muchos medios de comunicación se hicieron eco de esta delirante publicación por todo el territorio nacional.


ACTIVABURGOS.COM

El veterano portal de noticias locales, activaBurgos.com se hizo eco de la publicación EL LOCO DESTIERRO DEL CAMPEADOR a través de un extenso artículo.

Tal y como se puede apreciar en la imagen, EL LOCO DESTIERRO DEL CAMPEADOR contó, además, con una campaña publicitaria en dicho portal.